Estudios tuberculosis
Soluciones para la tuberculosis Las sustancias húmicas y fúlvicas del suelo se mantienen Soluciones para la tuberculosis Un informe oscuro y muy técnico del gobierno de los EE. UU. muestra que existe una correlación directa entre las sustancias naturales del suelo (humus, húmicas, fúlvicas) y la ausencia de tuberculosis en los humanos. Este informe y muchos otros estudios revelan que ciertos extractos húmicos, particularmente ácidos fúlvicos, contienen un espectro magníficamente poderoso de micronutrientes naturales, fitoquímicos, agentes antivirales y similares a antibióticos que inhiben y destruyen directamente los patógenos de enfermedades, al tiempo que fortalecen y regulan el sistema inmunológico. , aumentando la salud general. En el informe, estos extractos, aunque indeterminados en ese momento, se describen como tan potentes como la penicilina en cantidades igualmente pequeñas.
"La forma actual de agricultura, a la que se opone nuestra agricultura biológica, conduce a la ruina del suelo y de la salud y, en última instancia, provocará la muerte de la humanidad". –Profesor Louis Kervran
El profesor Louis Kervran fue Ministro de Salud de Francia y miembro de la Academia de Ciencias de Nueva York. En este informe, un gobierno de EE. UU. La circular informativa de la Oficina de Minas del Departamento del Interior de EE. UU. muestra una correlación directa entre la exposición de los mineros del carbón a sustancias húmicas y su total ausencia de tuberculosis. Antiguo p Muchos científicos han demostrado que estas diversas sustancias antipatógenas son producidas por microbios beneficiosos comunes a los suelos ricos en humus. Los microbios se concentran y convierten la materia vegetal superior formando compuestos solubles (ácidos fúlvicos) que se transportan fácilmente a las raíces de una nueva planta y a toda la planta, a menudo acumulándose en áreas específicas de la planta. El informe del gobierno analiza el hecho curioso de que se descubrió una alta concentración de microbios aún vivos dispersos por el interior de todas las sustancias húmicas crudas, con proporciones, tipos y especies consistentes con los distintos tipos de humatos. Se identificó que muchas de las cepas de microbios pertenecían a las mismas familias responsables de algunos de los medicamentos y antibióticos más conocidos, más recientes y más respetados de la industria farmacéutica, que, curiosamente, se encuentran todos en la capa superficial del suelo saludable. Aunque los diversos estudios incluidos en el informe gubernamental demostraron que los científicos conocían e identificaban las diferentes especies y tipos de microbios y estaban familiarizados con las sustancias antibióticas que producen, las poderosas sustancias antipatógenas que lograron aislar de los humatos no pudieron identificarse. La especulación es que estas sustancias abarcan todo el espectro de antibióticos conocidos y aún por descubrir de la naturaleza. Los extractos aislados de sustancias húmicas tuvieron una actividad comparable o mejor que la de la penicilina a tasas de dilución similares o incluso mayores. Los diversos estudios demostraron que, además de prevenir la tuberculosis entre los mineros, se descubrió que las únicas y variadas sustancias que combaten enfermedades tienen actividad contra muchos otros patógenos de enfermedades humanas, y también contra bacterias fitopatógenas. Investigaciones científicas recientes están desentrañando gradualmente el misterio y están demostrando que una de las razones por las cuales las sustancias antibióticas individuales relacionadas con los húmicos son difíciles de identificar es porque existe un espectro tan inmenso y diverso, que se han combinado molecularmente y también se han modificado e interconectado. -vinculados entre sí. Un área de inmenso interés que se ha identificado son los grupos quinoideos, que consisten en quinonoides, quinolonas, quinonas, etc. Los farmacólogos están descubriendo que estas sustancias son algunos de los antibióticos más poderosos que existen y que algunos de ellos fortalecen y mejoran la salud general al aumento de la resistencia a las enfermedades. Los grupos quinoideos son muy comunes en los extractos húmicos de alta calidad, especialmente ciertos ácidos fúlvicos.
Referencias: Departamento del Interior de los Estados Unidos: Oficina de Minas, Circular de información 8075, Microbiología del carbón, Martin H. Rogoff, Irving Wender, Robert B. Anderson, 1959. Neumoconiosis de los mineros del carbón, WD Evans, Coll. Ing., vol. 27, 1951, págs. 513-518 Sustancias antibacterianas en semillas, L. Ferenczy, Nature, vol. 178, 1956, págs. 639-640 Raphanin, un principio antibacteriano del rábano, GY Ivanovics e I. Horvath, Nature, vol. 160, 1947, págs. 297-298 Sustancias antibióticas del duramen de Thuja plicata III. La Constitución de g-Thujaplicin, J. Gripenberg, Acta Chem. Escandinavica, vol. 2, 1948, págs. 639-643 Equilibrio húmico, fúlvico y microbiano: acondicionamiento orgánico del suelo, William R. Jackson, PhD., 1993, Jackson Research Center, Evergreen, CO. Pay Dirt; Ingrid Wickelgren; Ciencia popular, marzo de 1996